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| Datos Generales |
Índice |
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Este número contiene 1 historia:
- The Black Sphinx of Nebthu (35 págs.)
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| Comentarios de la edición |
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"The Black Sphinx of Nebthu"
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| Equipo Creativo |
| Guión |
Lápiz |
Tinta |
Color |
Rotulación |
| Roy Thomas
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John Buscema
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Ernie Chan
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G. Roussos
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Joe Rosen
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| Detalles |
| Protagonistas |
Conan
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| Personajes Secundarios |
Dragones Negros (Amric) - Trocero - Palantides - Conn - Thorus - Cenwulf - Diviatix - Chabela - Olivero
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| Personajes Invitados |
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| Enemigos |
Toth-Amon - Pantho
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Comentarios de la historia
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- A lo largo de la historia se hace mención a hechos ocurridos en el número anterior de la colección.
- Esta historia es una adaptación de un relato homónimo escrito por L. Sprague de Camp y Lin Carter. Además, se hace referencia a la adaptación de la novela "Conan the Conqueror", en concreto a hechos ocurridos en The Savage Sword of Conan vol.1 #10.
- La historia está dividida en dos partes cuyos títulos son: "The Black Sphinx of Nebthu" (19 páginas); y "Chapter II The Black Beast Slays!" (16 páginas).
- Primera aparición de Amric, Cenwulf y Diviatix.
- Primera y única aparición de Thorus y Pantho, que mueren en el transcurso de la historia.
- La anterior aparición de Chabela y Olivero tiene lugar en The Savage Sword of Conan vol.1 #43, a la que se hace referencia.
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Sinopsis
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Zingara no tiene gobernante, y el duque Pantho de Guarralid marcha hacia su territorio, pero, inexplicablemente, carga contra Aquilonia, donde se enfrenta contra las fuerzas de Conan y es asesinado. Conan habla de la situación con el general Palantides esa noche en su tienda y llega a la conclusión de que los hechiceros de Estigia han estado detrás del comportamiento errático de Pantho. El campamento se pone en pie tras la llegada de Diviatix, un druida picto, que trae un mensaje de los Señores de la Luz, y de los conocidos del cimmerio, Chabela y Olivero de Zingara, a los que Conan nombra reyes de Zingara. De camino a Estigia, pacifica algunos de los territorios fronterizos y se reúne en la frontera con sus fuerzas y su hijo Conn, quien confirma que los sacerdotes de Mitra han traído consigo un artefacto a petición del cimmerio. Conan comparte sus sospechas de que Toth-Amon está manipulando los eventos, y marchan hacia Estigia, de camino a Nebthu, una ciudad en ruinas dominada por una fortaleza tallada en forma de hiena. El ejército acampa, pero Conan no puede dormir, y descubre que lo mismo les ocurre a Trocero y Conn. Pronto se les unen Diviatix y Palantides, y Conn descubre unas huellas que se dirigen al campamento. Conan sospecha que puede haber un espía y las siguen hasta la esfinge en forma de hiena. Encuentran una huerta oculta y descienden a una ciudad subterránea, donde, en un gran anfiteatro, Thoth-Amon se sienta en un trono rodeado de cientos de estigios con túnica. El mago se burla de Conan, diciéndole que su campamento se encuentra bajo asedio y Palantides lleva a sus hombres en un valiente esfuerzo contra un enemigo que los supera. Bajo la ciudad, Thoth-Amon presume de sus poderes calentando la espada de Trocero hasta que arde, pero Conan, si preouparse, manda llamar a Diviatix, cuya mera apariencia asusta a los estigios. El druida lanza grandes explosiones de energía blanca que golpean a los estigios. Thoth-Amon los reanima y lanza ratos de energía oscura contra Diviatix. Conan revela entonces lo que había encargado que trajeran sus sacerdotes, el místico Corazón de Ahriman, que en manos de Diviatix aumenta exponencialmente su poder y hace que los estigios estallen en llamas. Thoth-Amon huye tras lanzar a una hiena demoniaca gigante contra los aquilonios. La pequeña banda huye y emerge de la estructura gigante en medio del ejércido estigio. Se esconden mientras la bestia salta hacia ellos y, al verse rodeada de humanos, se lanza a un frenesí asesino, barriendo prácticamente todo el ejército mientras sale el sol, momento en el que regresa a la estructura construida con su forma. Los sorprendidos aquilonios lo celebran y Diviatix revela una visión de que Thoth-Amon se dirige a Zimbabwei. El druida inscribe unas runas en la espada de Conan, y el rey arenga al ejército para marchar hacia el sur para enfrentarse a Thoth-Amon y derrotarlo de una vez por todas.
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