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Michael Lawrence Witherby fue un artista de cómics que destacó en su faceta como entintador, conocido principalmente por su trabajo para Marvel Cómics durante los ochenta y los noventa. "Mi cómic favorito cuando era pequeño era probablemente The Amazing Spider-Man, pero entonces podías coleccionar toda la línea de cómics de Marvel por 1,20$, así que lo leía todo, aunque nunca pude forzarme a leer los cómics románticos".
"Siempre quise dedicarme a los cómics, pero me disuadieron de ello cuando estaba en el colegio y la gente a la que me presentaron de la industria del cómic también me disuadieron de dedicarme profesionalmente a los cómics. Así que perdí el interés durante muchos años. Entonces acabé perdiendo el trabajo y pensé que ese era el momento de decidir qué quería hacer realmente y empecé a prepararme para hacer cómics. Mi primer trabajo fue de hecho en la industria de los juegos, dibujando ilustraciones para un juego de rol titulado Champions. Si te retrotraes a los años setenta, los juegos de rol eran todavía algo osucro. En los noventa empezaron a aparecer tiendas especializadas de ellos en todos los centros comerciales. Los juegos de héroes en los que trabajaba alcanzaron su cénit a mediados de los ochenta. Hacía algunos diseños de personajes, pero principalmente me asignaban cubiertas. Hacía las cubiertas a color para su libro trimestral y trabajaba como entintador en Champions e ilustré un libro llamado Enemies Three, que era un pack de varios villanos que podías usar en estos juegos".
Joe Rubinstein jugó un papel importante en su labor como dibujante: "Lo conocí en una convención en 1980-1982. Era el único profesional del cómic que me hablaba realmente de mi trabajo. Hablaba con muchos profesionales y normalmente me decían solo 'sí, sigue así' o 'sigue intentándolo y lo conseguirás', pero Joe me dio instrucciones muy claras y críticas de gran nivel. Creo que fue uno de los pocos que podría haberme dado estas correcciones severas y mantuvimos la relación después de eso y se convirtió en mi mentor".
Unos años después hice un viaje a Nueva York y hablé con algunos editores de las oficinas de Marvel, lo que llevó a hacer Silverhawks, que fue mi primer encargo profesional de un cómic. Acabé trabajando para Innovetion bajo la tutela de David Campiti. Me llamó y me preguntó si quería hacer cómcis y empezamos trabajando desde ahí. Trabajé en Hero Alliance y Newstralia, ambos publicados en Innovation".
En los noventa su trabajo más conocido es como entintador de Morbius The Living Vampire. "No había hecho ningún trabajo para Marvel durante 4 o 5 años por aquel entonces. Acabé trabajando como ayudante de Joe Rubinstein. La labor de ayudante de Rubinstein fue muy intensa, y podría decirse que me salieron los dientes con The Infinity Gauntlet. Hice algunos de los fondos y tuve alguna mención especial en los primeros recopilatorios de estas historias. Este fue alguno de los trabajos que hice cuando me quedé con Joe Rubinstein en Brooklyn, mientras él me miraba por encima del hombro. Estaba entintando a Ron Lim, pero también conseguí trabajar entintando lápices de George Pérez. Me llevó a su apartamento en Brooklyn y me enseñó durante una semana. Mientras estaba allí, me llevó a Marvel y a la oficina de Bobbie Chase. Hechó un vistazo a mis tintas y a lo que hice en Hero Alliance y le gustó, por lo que me ofreción un trabajo en The Incredible Hulk Annual vol.1 #17 entintando a Ron Wagner. A Ron le gustó lo que hice, así que me dieron la posiblidad de entintarlo en Morbius The Living Vampire. Fue simple: era la primera vez que iba allí y me ofrecieron trabajo".
"Fue una etapa genial que disfruté mucho. Ron hizo un gran trabajo a los lápices, lo que hizo mi trabajo muy divertido y lo entinté de todo corazón. Creo que mi número favorito es el trecero, en el que sale Spiderman. Crecí leyendo a Spiderman y siempre me había gustado el personaje. Entintarlo en un cómic de Marvel fue un sueño hecho realidad. El segundo número fue el que supuso el mayor reto. Ron había dicho que quería que fuéramos en una dirección diferente a la que yo estaba acostumbrado. La portada del primer número era un poco mi tributo a Joe Sinnott entintando a Jim Steranko. Es el tipo de dibujo que hizo Ron y en el segundo número dijo que quería ser más anguloso. Cambió el look de Morbius y lo hizo más psicótico, como un monstruo o algún tipo de maníaco, así que tomé una dirección diferente para mi entintado tanto en la cubierta como en el cómic. Hice mucho de lo que yo llamo trituraciones, lo que en la industria se llama salpicaduras. Fue un acercamiento nuevo para mí. Había crecido con la referencia de Joe Sinnott, que tenía unas tintas más suaves".
"Trabajé con Ron en un par de cómics del Castigador, e hicimos Ghost Rider Vol.2 #25-Ghost Rider Vol.2 #26. Si mal no recuerdo, esos los hicimos antes de Morbius The Living Vampire. El Castigador de los años ochenta era un temerario, un villano, algo entre semihéroe y semivillano, y no estaba tan ricamente definidio como estaba en los noventa. En los ochenta aparecía y desaparecía, no tenía la personalidad de los noventa. En los noventa era más una rata urbana, pero llevada al extremo".
"Jim Shooter me invitó a trabajar en su nueva empresa, Defiant, que nunca fue una empresa de verdad, pero aprendí mucho trabajando para él. Trabajé en Warriors of Plasm, que era un concepto de lo más extraño. La idea era que esos tíos vivían en un planeta de carne y hueso con concienca que podía manipular los genes hasta el punto de manipular la vida. Era un cómic salvaje. Por desgracia, Marvel demandó a Defiant por infringir una marca refistrada en el título del cómic. Marvel perdió la batalla legal, pero los costes que tuvo que asumir Defiant para defenderse supusieron la muerte de la compañía".
Los años noventa le resultaron muy interesantes al dibujante: "Por entonces había una gran explosión de creatividad y fue un auténtico viaje y una época de crecimiento para los cómics. Hubo una explosión de compañías independientes y una gran demanda de talento en toda la industria. Entonces, al comienzo del colapso del Marvel, todo eso acabó destruido. Ese fue un mal momento para mí. Había evitado firmar ningún contrato por nadie, porque lo que yo quería era salir a jugar al campo. De lo que no me había dado cuenta es de que Marvel iba a caer en bancarrota y destruir el campo. No pude encontrar trabajo y tuve que ayudar de ayudante por una temporada y fueron tiempos duros".
"Algunos amigos y yo publicamos nuestro propio cómic a finales de los noventa. Estábamos viviendo en el valle de Coachella, que está en el área de Palm Springs. Tenía a un par de jóvenes artistas viviendo cerca que querían ser entintadores. Así que les ayudé y fue como llevar un pequeño estudio. Según fueron mejorando, les dejé ayudarme con algo de mi trabajo para que tuvieran una idea de lo que era hacer un cómic, así que yo entintaba aproximadamente la mitad. Habían coincidido con mucha gente que aseguraba que quería publicarlos, pero nadie lo hizo. Tenía un poco de dinero de los royalties entonces, así que lo publiqué. The Wild! era muy divertido, pero no tuvo el suficiente éxito para publicar un segundo número, en una época en la que todo el mundo compraba un primer número de lo que fuera y el primer número vendió razonablemente bien, pero los pedidos para el segundo no reflejaban ningún apoyo de los lectores. Me siento muy contento de haberlo publicado".
Tras estar un tiempo alejado del mundo de los cómics debido a problemas médicos, en 2015 volvió con un proyecto personal, Strength Monsters, relacionado con la lucha libre.
Autobiografía realizada a partir de una entrevista del autor publicada originalmente en Grand Comics Database, ampiada con datos de Grand Comics Database.
Fotografía obtenida en Marvel Wikia.
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