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Esad Ribic es natural de Croacia, país centroeuropeo que formara parte de la amtigua Yugoslavia. Tras una juventud dificil, Ribic irrumpió en la industria del cómic mediante Codename Scorpio, que publicó la pequeña editorial Antartic Press.
A finales de la última década del siglo XX, DC se puso en contacto con él para encargarle diversos proyectos, hasta que por fin captó la atención de Marvel, en la que se estrenaría con los últimos capítulos de X-Men: Hijos del Átomo. A esta nueva versión del origen de la Patrulla-X se uniría el The Uncanny X-Men 2000, algunos números de La Hermandad y de Ultimate X-Men y un buen número de portadas para la colección de Lobezno.
La obra más destacada de Ribic, sin embargo, se situaría fuera del entorno mutante, y le valdría el aplauso mundial. Se trata de Loki, una espectacular miniserie sentrada en la figura del malvado hermanastro de Thor, y en la que Tibic demostró con creces sus habilidades pictóricas. Tras su publicación, en 2005, este incuestionable artista necesitaría dos años para culminar Estela Plateada: Réquiem, con el que marcaría un nuevo punto de excelencia en su carrera. Posteriormente, siguiendo la misma línea realizó Namor: En las profundidades.
Sus últimos trabajos destacables en la Casa de las Ideas son su participación en la serie Thor: God of Thunder, junto al guuionista Jason Aaron, y el dibujo de la miniserie Secret Wars, a lo largo de 2015.
Entre las influencias de Ribic, el artista cita a Miguel Ángel, Leonardo da Vinci, Rembrant, John Buscema, Frank Frazetta, Moebius y Bill Sienkiewicz
Biografía publicada en Marvel Graphic Novels: Namor - En las profundidades, con algunas ampliaciones.
Fotografía obtenida en Wikipedia.
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