Luke Skywalker repara el transportador y utiliza el combustible de sus droides para escapar de los soldados y llegar hasta su nave, pero ésta está siendo desmantelada por los Jawas. Han Solo le convence para que lleguen a un acuerdo con ellos. Éstos les llevan a las proximidades de las granjas de Tagge, donde los Jawas encuentran un vaporizador gigantesco. De repente, Luke siente que la torre empieza a enfriarse y les advierte a todos para que huyan. El aviso llega a tiempo para impedir que sean congelados por el Omega Frost, el resultado de las máquinas construidas por Silas Tagge. Éstas han detectado a los rebeldes espiándoles. El Barón Tagge intenta acorralarlos, pero Luke se da cuenta. Los Jawas, agradecidos por haberles salvado, les ayudan voluntariamente. El grupo logra derrotar a las tropas enemigas.
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