El General Rieekan revela que uno de sus mejores hombres ha muerto tras descubrir por qué el Imperio no ha construido una segunda Estrella de la Muerte tras la destrucción de la primera: el Imperio está construyendo secretamente un arma que podría ser incluso peor a la que llaman Tarkin. Luke Skywalker es enviado junto a Leia Organa, Chewbacca y sus droides para destruirla desde dentro. Lando Calrissian se ofrece para ayudar, pero los amigos de Han Solo no le han perdonado su traición y es dejado de lado. Dentro de la nave, Darth Vader siente la presencia de Luke. Mientras, sus lugartenientes, hartos de las muertes de oficiales a manos de Vader, conspiran contra él.