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| Datos Generales |
Índice |
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Este número contiene 1 historia:
- "The Coming of... Dragon Lord!" (38 págs.)
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| Comentarios de la edición |
- Entre los diferentes contenidos publicitarios se incluye "The Hulk vs. the Phoomie Goonies", con la particularidad de que es un cómic protagonizado por Hulk, que publicita unos pastelitos, de autor desconocido (1 página).
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""The Coming of... Dragon Lord!""
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| Equipo Creativo |
| Guión |
Lápiz |
Tinta |
Color |
Rotulación |
| Ed Hannigan
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Steve Ditko
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Steve Ditko
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Hannigan
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Ron Zalme
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| Detalles |
| Protagonistas |
Cuatro Fantásticos (Mister Fantástico - Chica Invisible - Antorcha Humana - Cosa)
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| Personajes Secundarios |
Franklin Richards - Hombre Dragón - Ral Dorn - Gregson Gilbert - Hoagie - Russ - Dwight - Los Hudaks
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| Personajes Invitados |
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| Enemigos |
Skagerackräkor - Jinetes de Dragón (Zworill - Lalique) - Diablo
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Comentarios de la historia
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Sinopsis
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En medio de la noche, un hombre llamado Ral Dorn huye de los Jinetes de Dragón, quienes lo acusaron de asesinar a un dragón, el peor crimen jamás cometido en su reino natal de Ramatopolen. Rodeado por todos lados, Ral decide defenderse con su Vara de Dragón. Sin embargo, no prevé que uno de sus perseguidores tenga una pistola y le dispare por la espalda. Mientras tanto, no muy lejos, La Cosa está tomando una copa con varios exalumnos en la taberna local cerca de su antigua alma mater, la Universidad State. Durante la juerga, Ben recuerda que la última vez que él y Los Cuatro Fantásticos estuvieron en el campus fue cuando el Doctor Gregson Gilbert desató accidentalmente al androide Hombre Dragón sobre el mundo. Recuerda cómo lucharon contra la criatura, pero en última instancia fue su enamoramiento con la Chica Invisible lo que los llevó a su victoria final. El recuerdo se interrumpe repentinamente cuando Ral Dorn tropieza con la vara y se derrumba en el suelo. Ben se da cuenta de que le han disparado al extraño y sale corriendo para ver quién es el responsable, pero no encuentra a nadie alrededor. Sin sus compañeros de equipo con él, lo mejor que puede hacer Ben es encontrar un teléfono y llamar a una ambulancia. Varios días después, el incidente es casi olvidado cuando Ben se sienta a almorzar con Reed, Sue, Johnny y Franklin en Nueva York. Su comida se interrumpe repentinamente cuando suena la alarma de intrusos de Reed, advirtiéndoles que alguien ha irrumpido en la sede del Edificio Baxter. Johnny, Reed y Sue se apresuran a ver cuál es el peligro, dejando que Ben pague a regañadientes la cuenta de sus compañeros de equipo. Johnny llega al techo del Edificio Baxter y ve a Ral Dorn en el techo. Ral le dice que se retire y se niega, listo para usar su Vara de Dragón para defenderse y evitar la captura de sus perseguidores. Ral usa el bastón para absorber la llama de Johnny, enviándolo a caer por el costado del edificio. Es rescatado por una extraña criatura que se hace llamar Lalique, quien le asegura a Johnny que la situación está bajo control. Arriba, los Jinetes de Dragones se abalanzan sobre Ral, pero él es ayudado por la Chica Invisible y Mister Fantástico, que buscan respuestas para la batalla que se libra en el techo de su cuartel general. Con sus enemigos distraídos, Ral intenta huir dentro del edificio y se encuentra con La Cosa. Al recordarlo como el chico al que dispararon antes, Ben cree en su historia de que es inocente de los crímenes de los que lo acusan los Jinetes de Dragón y lo lleva al interior antes de entrar él mismo en la refriega. Mientras está abajo, la llama de Johnny regresa y obliga a Lalique a huir mientras el resto de su equipo lucha contra el resto de los Jinetes de Dragones. Más tarde, Los Cuatro Fantásticos se sientan y exigen respuestas de Ral Dorn sobre por qué lo persiguen. Ral explica que vive en otra dimensión llamada Ramatopolen, donde los Jinetes de Dragones son los guerreros más prestigiosos de la tierra, siendo seleccionados cuidadosamente para vincularlos mentalmente con los dragones que usan como monturas. Deseando convertirse él mismo en un Jinete de Dragón, Ral trabajó con los Houdaks, la raza de seres que estaban a cargo de criar a la próxima generación de dragones. Después de años de arduo trabajo, el Señor Dragón Skagerackrakor comenzó la ceremonia que emparejaría a cada nuevo Jinete de Dragón con una montura compatible. Sin embargo, los Houdak tuvieron una noticia trágica: que esta generación de Jinetes de Dragón lo será solo de nombre, ya que no habrá dragones para montar. Decepcionado por esta noticia, Ral Dorn se marchó furioso, y cuando más tarde fue a buscar un dragón para él, se horrorizó al ver que todos habían sido asesinados por una mano invisible. Atrapado entre los dragones muertos, Ral fue acusado de asesinarlos. Huyendo con su única amiga Lalique, Ral se enfrentó a Skagerackräkor, quien trató de evitar que usara un portal para llegar a la Tierra. A pesar de esta oposición, Ral logró escapar a través del portal con Lalique a la dimensión de la Tierra, hogar del padre de Ral. Allí, Ral había saltado para localizar al Hombre Dragón, a quien cree que es lo suficientemente poderoso como los dragones de su tierra. Después de una discusión, y a pesar de las reservas de Johnny, Los Cuatro Fantásticos aceptan ayudar a Ral a encontrar al Hombre Dragón y limpiar su nombre. En ese mismo momento, el Hombre Dragón se esconde en una mina abandonada ubicada en Pensilvania, donde duerme después de su reciente aventura en el exterior. Los Cuatro Fantásticos pronto comienzan a rastrear los patrones cerebrales del Hombre Dragón, llevándolos al pozo de la mina, pero sin saber que los Jinetes de Dragón los están siguiendo en secreto. Dentro de los estrechos túneles, Los Cuatro Fantásticos y Ral son atacados por los Jinetes de Dragón. A medida que avanza la batalla, despierta al Hombre Dragón que va a ver qué es la conmoción. En el fragor de la batalla, el Hombre Dragón reconoce a Sue y se acerca a ella. En ese mismo momento, Ral salta sobre la espalda de Hombre Dragón y activa un dispositivo que se teletransporta a sí mismo, a Sue y al Hombre Dragón a otra dimensión. Al quedarse con los Jinetes de Dragones, Reed los convence de hacer una tregua y, a cambio de permitirles aprender la inocencia de Ral Dorn, aceptan trabajar juntos. Al regresar al Edificio Baxter, Reed construye una máquina de polígrafo que probará la inocencia de Ral pase lo que pase. Luego usan un dispositivo para sacar a Sue, Ral y el Hombre Dragón de la dimensión en la que se esconden. Traído de regreso a Ramatopolen, Ral desafía a Skagerackräkor a un duelo para luchar por su vida. La batalla continúa, y aunque Skagerackräkor gana la partida, finalmente Ral y el Hombre Dragón comienzan a tomar la delantera gracias al hecho de que Skagerackräkor ha estado drogando a su dragón mientras su creciente locura había comenzado a romper la simbiosis entre jinete y dragón. Con Skagerackräkor derrotado, se sorprenden al saber que Skagerackräkor había drogado a todos los dragones para evitar que los Jinetes de Dragones pudieran detener su intento de invasión de la Tierra desatando dragones no entrenados en ese mundo. Rápidamente, Los Cuatro Fantásticos, Ral Dorn y el Hombre Dragón se teletransportan a la Tierra. Allí, Ral y el Hombre Dragón logran arrear a los dragones salvajes y devolverlos a Ramatopolen. Ahora, el nuevo Señor de los Dragones, Ral,agradece a los Cuatro Fantásticos toda su ayuda antes de regresar a su dimensión de origen.
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