Cuando aparece el gran jefe, resulta ser el Extraño, que vino para vivir la extraña experiencia de vivir en el Oeste. Desafía al Capitán Marvel a un duelo en la calle, aunque se desarrolla como una pelea con sus respectivos poderes. El Extraño le dispara accidentalmente por la espalda. Después, decepcionado y desilusionado con su fantasía, abandona el asteroide. Mar-Vell y Rick también se marchan en dirección al planeta Deneb IV.