La historia comienza descubriéndonos que el Planeador Maestro es en realidad el Dr. Octopus y les está pidiendo a sus hombres
que busquen maquinaria atómica. Por su parte, Betty Brant quiere saber por qué Peter la rechazó, pero este se niega a explicarlo y golpea a
Ned Leeds para enfurecer a Betty. Luego intenta venderle unas fotos de unos manifestantes a J. Jonah Jameson, pero sin fortuna. Cuando Peter va
a visitar a su Tía May, el médico le dice que ha absorbido una partícula radioactiva en la sangre (deduce Peter que por la transfusión que
le hicieron de su sangre en The Amazing Spider-Man Vol.1 #10), así como que no saben de qué forma curarla. El joven universitario decide
entonces visitar al Dr. Curt Connors en su identidad de Spiderman que amablemente se ofrece a ayudarle. Piensa que con un potente suero, el
ISO-36, serán capaces de fabricar una cura. El doctor hace un pedido que le tienen que traer de la Costa Oeste, pero esa noticia llega a oídos de
los colaboradores del Dr. Octopus, quien les ordena que lo roben. Cuando el Dr. Connors se entera, un enfurecido Spiderman sale a buscar al
Planeador Maestro, encargándole a Frederick Foswell que le pase cualquier información que descubra de él. Igualmente, recorre todos los garitos de
maleantes en busca del Planeador, destruyendo todo a su paso, pero sin fortuna. Finalmente, llega a un callejón en el que su sentido arácnido le
avisa de algo, arranca el suelo y encuentra la guarida del Planeador Maestro. Derrota a sus secuaces y busca el suero. El Dr. Octopus lo usa a modo
de cebo y, cuando el arácnido intenta cogerlo, comienza a atacarlo. En su furia, el trepamuros, destroza todo, incluyendo una pesada maquinaria que
cuelga del techo. El Dr. Octopus escapa de ella, pero él queda atrapado, con el suero apenas a un metro y además con una filtración de agua que
terminará por inundar la sala.
|