WILFRED SANTIAGO
Ponce, Puerto Rico (noviembre de 1970)
Dibujante
Entintador
Portadista

Wilfredo Santiago Cardona es un ilustrador, así como dibujante de cómics y novelas gráficas que ha trabajado en el medio desde los años noventa. Su trabajo ha aparecido en The New York Times, Marvel Comics, Sports Illustrated, Little, Brown Books, Dutton Books, DC Comics y Fantagraphics. Nació y creció en Puerto Rico, siempre estuvo muy interesado en el arte, específicamente en la pintura. Ha dibujado de forma natural y autodidacta desde que tiene memoria. A medida que crecía, también pasaba tiempo en los Estados Unidos con miembros de su familia y con su madre en Maryland, antes de que ella se divorciara de su segundo marido. Con 19 años se marcha definitivamente a Estados Unidos, viviendo primero en Texas y luego en Nueva York, donde se mudó en 1990. Nace entonces su interés por los cómics. El primer cómic que Santiago leyó asiduamente era la revista MAD, pero no fue hasta que leyó Watchmen de Alan Moore que comenzó a interesarse realmente por los cómics como arte secuencial, no meramente por su aspecto estético. Comienza a dibujar por su cuenta y a enviar muestras a las editoriales neoyorquinas, mientras trabajaba de cocinero en restaurantes de comida rápida.

Un buen día a finales de 1993, Santiago acudió a las oficinas de Milestone Media, el sello de DC Comics especializado en superhéroes multiculturales, y enseñó su portafolio al editor y fundador Denys Cowan, quien se tomó el tiempo de mirarlo y de hacerle algunas pruebas antes de contratarlo. Sus primeros encargos fueron la portada de Hardware #13 y la historia completa de Icon #12. Cowan, sorprendido por la enorme calidad del joven Santiago, le asigna la serie Static (ahora conocida como Static Shock), en la que dibuja los números 11, 13 y 16-30. En 1996 deja Static para realizar otras cosas, tanto en DC como en Marvel Comics. En la primera dibuja algún número de otras series de Milestone, mientras que para la Casa de las Ideas dibuja un cómic de la cabecera Cable y el one-shot Maverick, que además entinta. También dibuja la portada de una entrega del título What If vol.2 y una historia del Capitán Marvel incluida en Marvel: Shadows and Light, pero el estilo de Santiago, fuertemente influenciado por Dave McKean y Bill Sienkiewicz, no acaba de encajar en Marvel, lo que, unido a la crisis que vivía la editorial y el sector entero, provoca que Santiago abandone los cómics “comerciales” e incluso abomine de esa parte de su carrera en la que apenas tenía control artístico sobre su trabajo.

Se traslada a vivir al extrarradio de Chicago, desde donde se dedicó a la ilustración comercial en revistas, portadas de álbumes de música y libros, además de algunos proyectos de cómic para editoriales independientes. Entre estos últimos, coescribió y dibujó una novela gráfica erótica de 120 páginas titulada The Thorn Garden para Eros Comix, a la que siguió Pink, también para Eros Comix, que contenía tres nuevas historias eróticas escritas y dibujadas por Wilfred. Entre 1998 y 2000 colabora con Ho Che Anderson en la serie Pop Life de Fantagraphic Books, trabajo que consiguió tras contestar a un anuncio en The Comics Journal, otro empleo alimenticio del que no se siente especialmente orgulloso, igual que su contribución en la serie porno Dirty Stories, de Fantagraphics, también en el año 2000. Estas colaboraciones propiciaron que Fantagraphics publicara en 2004 su primera novela gráfica completa, guion y dibujo, In my DarkestHour, un viaje personal a través de la depresión y la identidad, en la que su protagonista, Omar Guerrero, se enfrenta a sus sentimientos de inadaptación, ira, culpa y creciente alienación en un formato a tan solo dos colores. Este es el primer cómic del que Santiago se siente orgulloso de haber hecho.

Tras esta primera incursión en los guiones, Santiago ha explorado el camino de los cómics biográficos. En 2001, Fantagraphics publica la novela gráfica 21: The Story of Roberto Clemente, una biografía magistral de Roberto Clemente, un jugador de béisbol portorriqueño miembro del Salón de la Fama. En sus páginas, la figura de Clemente se estira y contorsiona en el diamante de béisbol para adoptar el aspecto de un superhéroe. Realizó algo similar con Michael Jordan: Bull on Parade (2014), convirtiendo al icónico jugador de baloncesto en un superhéroe en las páginas, en lugar de en nuestras pantallas de televisión. Mientras que Santiago captura la tragedia de la prematura muerte de Clemente con un sentido de propósito fatalista, logra humanizar a Jordan como alguien con debilidades y una inusual ética de trabajo. La trilogía se cierra con Thunderbolt: An American Tale (Mad Creek Books, 2019), la biografía de John Brown, el feroz abolicionista cuyas hazañas violentas ayudaron a encender la mecha que condujo a la Guerra Civil norteamericana. Los ojos salvajes de Brown encajan perfectamente con la inclinación artística de Santiago por la distorsión y la hipérbole visual. En las tres novelas, Santiago ha contado con la ayuda en los guiones y en la edición de su pareja, Sanlida Cheng.

Desde finales de 2015 hasta 2017, Santiago regresó a la editorial Marvel Comics, dibujando tres portadas en los títulos Howling Commandos of SHIELD, Inhumans vs. X-Men y All-New X-Men vol.2, siendo sus últimas contribuciones a la Casa de las Ideas. Las historietas y novelas gráficas de Santiago son innovadoras, con formas que desafían el estilo clásico. Tiene una página web, aunque no parece estar en redes sociales. En ella asegura que ahora vive en algún lugar del Medio Oeste, entre serpientes, zorros y coyotes.


Biografía realizada con datos obtenidos en The Unofficial Handbook of Marvel Comics Creators, Grand Comics Database, Lambiek, Comic Vine, Comicosity, Chicago Tribune, The Comics Journal y el libro Your Brain on Latino Comics: From Gus Arriola to Los Bros Hernandez.
Fotografía obtenida en Marvel Database.