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Nacida en el clímax de los años sesenta, Kelly D. Krantz creció rápidamente en las calles de Huntington Beach, California. Emocionada con las imágenes de los comic books de los años setenta y ochenta, el arte del monopatín, las películas y el punk rock, Kelly refinó su descubrimiento temprano empleando su trasnorno obsesivo-compulsivo para ilustrar ocasionalmente cuadros bonitos. Finalmente, convirtiéndolo en una carrera, Kelly terminó trabajando para los mejores editores de cómics de superhéroes y realizando gráficos de skate realmente horribles. Su trayectoria en la industria del cómic se desarrolló durante la década de los noventa, trabajando para editoriales como Tekno Comix, Dark Horse, Supergenius Comics, Malibu y Marvel Comics. Debutaría en 1992, al ser contratado por la Casa de las Ideas como dibujante de la serie Sleepwalker, escrita por el guionista Bob Budiansky, en la que permanecería dos años. También realizó algunos pin-ups que se publicarían en diversas publicaciones de la compañía. Posteriormente, trabajó en algunos títulos de la línea Ultraverse para la editorial Malibu, entre los que se incluyen Hardcase y Warstrike. Además, participó en algunas cabeceras de Image Comics entre 1994 y 1995, como Spawn y The Machine. Sus últimos trabajos conocidos en el mundo del cómic fueron como entintadora, participando en la antología Neil Gaiman's Wheel of Worlds y en Adam Cain, ambospara el sello independiente Big Entertaiment y publicados durante el año 1995. A mediados de los noventa, Kelly se traslada a San Francisco, porque pretende trabajar en el mundo del tatuaje, ya que es una carrera que le hacía mucha ilusión, dejando para ello los cómics. Pronto entabla buenas relaciones en la ciudad con diversos tatuadores de los que se hace amiga. Uno de estos amigos la ayudó a dar sus primeros pasos para aprender el oficio y finalmente la llevó a mudarse a un destino con el que soñaba desde su infancia en la ciudad de Nueva York, donde trabajó en la East Side Ink original durante un breve período de tiempo. Más tarde, consiguió acomodarse en la tienda de bajo perfil Fly-Rite Tattoos, en la cual trabajó una temporada. Pero su deseo de vivir en la ciudad se desvaneció y Kelly se arriesgó trasladándose al norte para trabajar en el estudio Vanguard Tattoo, donde encontró un nuevo hogar para perfeccionar su oficio. Capaz de manejar todas las facetas de las imágenes de los tatuajes, Kelly es una artista muy completa, capaz e innovadora. Biografía realizada con datos obtenidos en comicbookdb, ancestry y Vanguard Tattoo. |