LUDWIG FEUERBACH
Landshut, Alemania (28 de julio de 1804) - Núremberg, Alemania (13 de septiembre de 1872)
Guionista

Ludwig Andreas Feuerbach fue un filósofo alemán, antropólogo, biólogo y crítico de la religión. Es considerado el padre intelectual del humanismo ateo contemporáneo, también denominado ateísmo antropológico. Abandonó sus estudios de Teología para estudiar Filosofía en Berlín junto a Georg Wilhelm Friedrich Hegel, a quien más tarde se opondría. Centró sus intereses en la elaboración de una interpretación humanística de la teología, en obras como Pensamientos sobre la muerte y la inmortalidad (1830) y La esencia del cristianismo (1841), su obra más destacada, en la que considera a Dios como una hipóstasis del hombre. Definido en términos abstractos pero pensado como ente sensible, Dios es en sí mismo una noción contradictoria según Feuerbach; su filosofía trata de reconducir esta y otras "espiritualizaciones" a la realidad del "hombre singular", el hombre físico, con sus sentimientos y necesidades concretas. Ludwig Feuerbach es una de las principales figuras del llamado "hegelianismo de izquierdas".

Hijo de un famoso jurista, estudió Teología en la Universidad de Heidelberg y posteriormente se trasladó a Berlín para seguir los cursos de Hegel, por quien quedó literalmente deslumbrado: "De Hegel he aprendido en un mes todo lo que antes no aprendí en dos años", dijo el propio Feuerbach. Doctorado en Erlangen, permaneció allí desde 1829 hasta 1832, como profesor libre. La ruptura con su maestro, sin embargo, surgió pronto y se concretó en Pensamientos sobre la muerte y la inmortalidad (1830), ensayo que por la tesis anticristiana que sostenía, inmortal es la humanidad, no el individuo singular, le costaría a Feuerbach la carrera universitaria. Se retiró entonces a una localidad de Baviera y cuidó de la publicación de Historia de la nueva filosofía, aparecida entre 1836 y 1841; de ensayos sobre Gottfried Wilhelm Leibniz y Pierre Bayle, y de una Crítica de la filosofía hegeliana (1839), así como de textos de crítica religiosa que fueron el prólogo dela principal de sus obras: La esencia del cristianismo (1841). Sucesivamente dio a luz Tesis de introducción a la reforma de la Filosofía, Fundamentos de la filosofía del porvenir (1843), y, finalmente, otros dos grandes textos: La esencia de la religión (1845) y Teogonía.

La fama de ateo determinó la completa marginación del filósofo del ambiente académico. Sólo en 1848, invitado por la asociación de estudiantes revolucionarios de Heidelberg, tuvo la oportunidad de impartir un curso universitario, que sería publicado tres años más tarde abjo el título Lecciones sobre la esencia de la religión. El resto de su vida vivió en soledad, apartado y en miserables condiciones económicas. En estado fragmentario quedó un ensayo sobre la ética, que la muerte le impidió terminar. Las reflexiones de Feuerbach se centraron siempre en la investigación de un único problema. El propio filósofo afirmo: "La primera tendencia que se hizo luz en mí no fue la ciencia o la filosofía, sino la religión. Como consecuencia de esta tendencia, hice de la religión el fin y la profesión de mi vida. Mi primer pensamiento fue Dios; el segundo, la razón; el tercero y último, el hombre". Feuerbach estaba interesado no tanto en el problema de la existencia de Dios como en el proceso de la formación de la idea de Dios en el pensamiento humano, y toda su filosofía puede resumirse en esta máxima: no es Dios quien crea al hombre, sino que es el hombre quien crea a Dios.

En su obra analiza y critica el hecho religioso desde una perspectiva antropológica: la religión es entendida como una forma de enajenación por la cual el hombre escinde la realidad en un mundo terrenal, material y sensible, y otro espiritual. Para superar esta escisión es necesario "mundanizar" e "inmanentizar" la religión, convertir la Teología en Antropología. Con su crítica de la teología especulativa de Hegel, Feuerbach ejerció una poderosa influencia sobre los jóvenes filósofos de la izquierda hegeliana, especialmente en la primera época de Karl Marx y Friedrich Engels.

La primera de sus obras principales, La esencia del cristianismo (1841), provocó gran entusiasmo, sobre todo entre los jóvenes. Con ella la izquierda hegeliana rompía las reservas que Hegel y sus epígonos de derechas habían conservado hacia el cristianismo, y extraía las consecuencias de la crítica iniciada en la obra Vida de Jesús, de David Friedrich Strauss, para quien los evangelios no son biografías de Jesús de Nazaret, sino relatos míticos y simbólicos destinados a expresar y propagar la fe. Para Feuerbach, la identidad del espíritu humano con el divino, afirmada por los hegelianos, no es más que la identidad del hombre consigo mismo. En La esencia de la religión (1845), el filósofo alemán renovó y completó la tesis desarrollada en La esencia del cristianismo. En esta segunda obra, partiendo del punto de vista de la religión en general, extiende su análisis a la idea de la naturaleza, de la cual es también una proyección la idea de Dios.De este modo se puede decir que la "Teología" no es tanto "Antropología" como "Fisiología", divinización de la naturaleza. Las religiones de todos los pueblos reflejan, en su idea de Dios, su interpretación del mundo y de la vida, su concepción de la naturaleza, sus instituciones políticas, su grado de civilización. Las ideas de este libro fueron divulgadas por Feuerbach en 1848 en una serie de Lecciones sobre la esencia de la religión, dadas en Heidelberg y publicadas en 1851.

Los primitivos representan, por ejemplo, la acción de la Providencia divina como el gobierno patriarcal de un soberano absoluto, cuya voluntad es ley en sí misma sin límites. Los teólogos racionalistas, no pudiendo ignorar la idea y el determinismo de la naturaleza, se resuelven a un compromiso: conciben a Dios como un soberano constitucional, cuya voluntad está limitada por leyes a través de las cuales se manifiesta: Dios reina, pero no gobierna. Pero la naturaleza está en realidad gobernada por un régimen republicano, esto es, sin soberano.

Las teorías de Feuerbach, especialmente su crítica de la religión, han tenido influencia en el mundo moderno, incluso en la cultura popular, y llegaron a alcanzar cierta difusión cuando en los años setenta se publicó el álbum Aqualung, del grupo de rock británico Jethro Tull, en el que, en su portada, se indicaba que "en el comienzo, el hombre creó a Dios y le dio poder sobre todas las cosas".


Biografía publicada originalmente en Biografías y Vidas, con datos añadidos de la Wikipedia.
Imagen obtenida en Biografías y Vidas.